Friday, March 27, 2009






Volviste.


Te siento.

Te extrañé un montón.


Ahora enseñame de nuevo a quien sacarle las garras y a quien ronronearle.







Volví de lo de mi madrina con un gato místico corretendome entre las piernas, con un citrino que me quema las manos, el corazón lleno de amor y una sensación tibiecita adentro.

Cambié de cristal y el mundo se ve un poco diferente.
Hay mas luz.
Y mucho camino por andar.


3 comments:

Pàola Morillo Saaghy said...

Volviste
y ahora somos tres.
Tú, yo y el gato que colecciona sueños de colores.

Bonito,
;)

Favio said...

lejos fui testigo de lo solo que se queda el trigal..
gracias por volver

:)

Dara said...

A Cat le gusta ese gatito negro. Querría tocarle la nariz con sus bigotes.




¡Miau!